Es de mañana
es temprano, muy temprano
Hago un té
tomo un libro
Todavía tengo tiempo de no encender monitores
de no abrir documentos
de no empezar tareas
Todavía tengo tiempo
de leer poesía
Leo que quien reinicia
no tiene proyecto ni hace trayectoria
Ese poema me dijo
que perdí la esperanza
y de allí, mi potencia
Por un momento decido
hacerle caso
escucharlo
y me acomodo en ese pedacito
de certeza
Por un momento decido
que he de abortar el proyecto
que jamás
podré hacer trayectoria
Por un momento
decido
renunciar a mi esperanza
a mi potencia
¡Estúpido poema!
¡Estúpido poeta!
¡Estúpida poesía!
“El poeta debe hacer que la espera, que el avance
corresponda a la emoción de lo que se propone:
suceden las palabras”,
declara aquél poema
El poeta soy yo
replico
Y esta es mi poesía
La poeta soy yo
reafirmo
Y yo soy mi poesía
“Siga las instrucciones
del mundo que ha elegido”,
me urge aquél poeta
Elijo las palabras
las elegí hace mucho
Las elijo todo el tiempo
Una y otra vez,
con ellas me reinicio
Porque yo soy poeta
Porque yo soy poesía
El poeta soy yo
Y el poeta debe
hacer
que las palabras sucedan
Las palabras son yo
porque yo soy las palabras
Con toda su esperanza
Con toda su potencia
que con cada poema
Reinician
Sigo las instrucciones
del mundo que he elegido:
con las palabras,
sucedo
Todavía tengo tiempo de no hacer otra cosa
de no encender monitores
de no empezar tareas
Todavía tengo tiempo
de hacer(me) poesía.